1️⃣ 💧 Prepara la solución de limpieza: Llena un recipiente grande con agua fría. Agrega 1 cucharada de sal gruesa y 1/2 taza de vinagre blanco. Mezcla bien hasta que la sal se disuelva.
2️⃣ 🍓 Sumerge las fresas: Coloca las fresas en la solución de agua, sal y vinagre. Asegúrate de que estén completamente sumergidas.
3️⃣ ⏰ Déjalas remojar: Deja que las fresas se remojen en la solución durante unos 10-15 minutos. Esto ayudará a eliminar cualquier insecto o residuo.
4️⃣ 🚿 Enjuaga las fresas: Después del remojo, enjuaga las fresas con agua corriente fría. Asegúrate de eliminar cualquier resto de la solución de limpieza.
5️⃣ ✂️ Retira los tallos: Una vez limpias, retira los tallos de las fresas. A veces, los insectos pueden esconderse en esta zona.
6️⃣ 🧺 Seca las fresas: Coloca las fresas sobre papel absorbente o un paño limpio para que se sequen completamente.
7️⃣ 🎉 ¡Disfruta!: ¡Tus fresas están ahora limpias y listas para comer! Puedes disfrutarlas solas, en postres, batidos o cualquier otra receta.
¡Ahora puedes disfrutar de tus fresas sin preocupaciones! Este método sencillo y natural te asegura que estén limpias y deliciosas. 🍓✨🌿