El kalanchoe es un género de plantas con 125 especies. Esta vibrante planta floreciente requiere un mantenimiento mínimo y puede ser cultivada tanto en interiores como en exteriores. Las kalanchoes de interior pueden necesitar un poco más de cuidado para evitar que crezcan demasiado grandes. Sin embargo, como la mayoría de las suculentas, las kalanchoes generalmente no requieren una poda extensa para mantenerse saludables y florecientes durante años.[1]
Método 1: Podar durante la Temporada de Floración
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Paso 1: Eliminar las flores marchitas inmediatamente.
- Eliminar las flores marchitas inmediatamente. Pellizca las flores muertas o moribundas tan pronto como aparezcan. Dejar flores muertas en la planta no solo se ve mal, sino que también impide que la planta produzca nuevas flores.[2]
- Puedes pellizcar las flores muertas con los dedos o cortarlas justo debajo de la base usando tijeras de podar estándar.
Paso 2: Cortar los tallos de las flores después de eliminar las flores marchitas.
- Cortar los tallos de las flores después de eliminar las flores marchitas. Usa tijeras de podar estándar para recortar el tallo de la flor hasta la segunda o tercera hoja. Esto fomenta el ramificado para que tu planta crezca más llena con una mayor cobertura de hojas.[3]
- Asegúrate de que tus tijeras de podar estén afiladas y limpias para no dañar tu planta o introducir enfermedades.
- Desinfecta tus tijeras de podar con alcohol frotado o lejía diluida en agua. Esto ayuda a prevenir la propagación de infecciones entre plantas.
Paso 3: Eliminar las hojas y brotes muertos o dañados.
- Eliminar las hojas y brotes muertos o dañados. Corta las hojas y tallos amarillos, marrones o en descomposición en la base, ligeramente por encima de donde la rama se une al tallo. Los brotes o hojas rotos o dañados deben ser eliminados usando el mismo procedimiento.[4]
- Inspecciona la planta cuidadosamente para asegurarte de que has eliminado todos los signos de descomposición o enfermedad, o podría continuar propagándose por toda tu planta. Eliminar el follaje muerto y dañado mantiene tu planta saludable y atractiva.
Método 2: Podar después del Ciclo de Floración
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Paso 1: Cortar el crecimiento alto cuando termine de florecer.
- Cortar el crecimiento alto cuando termine de florecer. Las kalanchoes volverán a florecer año tras año, pero requieren un poco más de cuidado para hacerlo. Podar tu kalanchoe después de que haya terminado de florecer en el año y eliminar todos los tallos de las flores para prepararla.
- Tu kalanchoe puede estirarse y volverse leggy si no recibe suficiente luz solar. Si tu planta se ve leggy después de la poda, muévela a un lugar donde reciba mucha luz solar directa.
- También puedes trasplantar tu planta a una maceta ligeramente más grande para fomentar un crecimiento arbustivo. Colócala en un lugar soleado y cálido, como cerca de una ventana.
Paso 2: Eliminar hasta un tercio de la longitud de cada tallo.
- Eliminar hasta un tercio de la longitud de cada tallo. Después de la floración, podar tu kalanchoe para fomentar un crecimiento fuerte y saludable la próxima temporada. Haz pausas y retrocede, manteniendo un ojo en la forma general de la planta.[5]
- Si un tallo está muerto o dañado, córtalo hasta la base, justo por encima de donde la rama se une al tallo.
Paso 3: Cortar a 1⁄2 pulgada (13 mm) de un nudo de hoja para dar forma a la planta.
- Cortar a 1⁄2 pulgada (13 mm) de un nudo de hoja para dar forma a la planta. Encuentra un nudo de hoja que esté orientado en la dirección en la que deseas que crezca el tallo. Corta el tallo en un ángulo de 45 grados usando tijeras de podar afiladas y limpias. El nuevo crecimiento se ramificará en la dirección de ese nudo de hoja.[6]
- El lado inferior de tu corte en ángulo debe estar aproximadamente a la misma altura que el nudo de hoja, en el otro lado del tallo.
Paso 4: Trasplantar o podar las raíces según sea necesario.
- Trasplantar o podar las raíces según sea necesario. Las suculentas, incluyendo las kalanchoes, crecen lentamente. Debido a esto, generalmente pueden vivir en la misma maceta durante varios años. Sin embargo, si logras que tu kalanchoe vuelva a florecer durante varias temporadas, es posible que necesites moverla a una maceta más grande eventualmente.
- Si ves raíces por encima del suelo o creciendo fuera de los agujeros de drenaje en la maceta, es una señal de que tu kalanchoe puede estar enraizada. Trasplantarla a una maceta más grande le permitirá continuar creciendo.
- Si deseas mantener tu kalanchoe aproximadamente del mismo tamaño, retírala de la maceta y poda cuidadosamente sus raíces.
Consejos para el Éxito:
- Usa Esquejes Frescos: Los esquejes tomados de plantas sanas y vigorosas tienen una mayor probabilidad de enraizar con éxito.
- Mantén la Humedad: La alta humedad es crucial para el enraizamiento. Asegúrate de que la cubierta de plástico permanezca en su lugar hasta que se formen las raíces.
- Evita el Exceso de Agua: Aunque la arena debe mantenerse húmeda, evita el encharcamiento, que puede causar la pudrición del esqueje.
Siguiendo estos pasos, puedes acelerar el crecimiento de tus esquejes de rosas en arena, asegurando una mayor tasa de éxito y un enraizamiento más rápido. ¡Feliz jardinería!