- Uso de sal de Epsom: Perfora agujeros profundos en el tocón y llénalos con sal de Epsom. Agrega agua y cubre con una lona. En unas semanas, el tocón comenzará a descomponerse.
- Fuego controlado: Taladra agujeros en el tocón, llénalos con líquido inflamable como queroseno, y enciéndelo. Vigila el proceso para evitar riesgos.
- Arranque con maquinaria: Utiliza una motosierra para cortar el tocón lo más cerca del suelo posible, luego renta una desbrozadora o excavadora para extraerlo por completo.
- Descomposición natural: Cubre el tocón con tierra y composta para acelerar su descomposición de forma natural con el tiempo.
🌱 ¡Elige el método que mejor se adapte a tus necesidades!